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Bajo el nombre xDSL se definen una serie de tecnologías que permiten el uso de una línea de teléfono estándar (la que conecta nuestro domicilio con la central de Telefónica) para transmisión de datos a alta velocidad y, al mismo tiempo, para el uso normal como línea telefónica. Se llaman xDSL (HDSL, ADSL, RADSL, VDSL) ya que todas tienen un mismo tipo de funcionamiento, pero distintas características en cuanto a prestaciones (velocidad de la transmisión de datos) y distancia máxima del domicilio a la central (el cable telefónico no se diseñó originalmente para este tipo de servicios, a mayor distancia menores prestaciones). Entre estas tecnologías, la más adecuada para un uso domestico es la llamada ADSL.

ADSL (Asymmetric Digital Subscriber Line: Línea de abonado Digital Asimétrica) es la tecnología de banda ancha que permite utilizar las líneas telefónicas convencionales para la transmisión de datos a alta velocidad, con acceso permanente, TARIFA PLANA, ... y simultáneamente la utilización del teléfono para hablar.

El carácter asimétrico de esta tecnología se adapta perfectamente a Internet, ya que los usuarios de la Red suelen recibir (velocidad de bajada o descendente) muchos más datos de los que envían (velocidad de subida o ascendente): por ejemplo, cuando se visita una página, se envía a la Red la petición (unos pocos bytes) y posteriormente se recibe en el ordenador la página deseada compuesta por texto e imágenes (el tamaño de los mismos depende del contenido y tipo de la página, pero es muy superior al tamaño de la petición realizada).

La otra característica importante de ADSL es que separa la voz y los datos, de forma que se puede hablar por teléfono aunque el ordenador esté conectado a Internet. ADSL se comercializa bajo la modalidad de cuota fija pagando una tarifa plana, con independencia de cuánto tiempo se haya tenido el ordenador conectado a la Red, y facturación independiente de la de voz.

El despliegue de ADSL posibilita la oferta de servicios de banda ancha a través del cable telefónico. El alto número de líneas telefónicas (en nuestro país hay casi 18 millones) permite extender este servicio a un gran número de usuarios residenciales y oficinas remotas.

Marco legal.

La oferta de servicios basados en ADSL en España está regulada por el Ministerio de Fomento, con el doble objetivo de tratar de satisfacer las demandas de los usuarios y favorecer la implantación de nuevas tecnologías. Fruto de ello ha sido la publicación de las Ordenes Ministeriales del día 26 de marzo de 1999 (O.M. 8181 y 8182 publicadas en BOE 086-1999 de 10 de abril de 1999), que han pasado a ser la pieza básica del marco normativo vigente en el sector.

En las citadas órdenes ministeriales se establece que Telefónica de España deberá proveer a todos los Operadores Autorizados que así lo deseen el acceso indirecto a su bucle, ofreciéndoles de este modo el soporte y capilaridad adecuados para poder acceder a usuarios finales, con independencia de su ubicación geográfica.

La Comisión del Mercado de las Telecomunicaciones establecerá los precios de acceso al bucle de abonado de acuerdo con los costes del servicio y en función de la evolución de la implantación de este servicio.

Estos precios incluyen:

Cuotas de instalación inicial.
Cuotas periódicas por la disponibilidad del acceso.
En su caso, otras cuotas por servicios auxiliares y suplementarios.


En resumen, la tecnología ADSL se instala sobre la línea telefónica estándar, y por lo tanto NO es posible en la actualidad contratar ADSL sobre otros tipos de servicios telefónicos, como es el caso de los operadores de cable, que cuentan con soluciones alternativas con tecnología de cable-módem y prestaciones similares.

Modalidades de acceso, velocidad de conexión y limitaciones técnicas

Los operadores de telefonía están obligados a ofrecer, al menos, tres modalidades:

Modalidad A: Ancho de banda descendente de 256 Kbits/segundo, y ascendente de 128 Kbits/segundo.
Modalidad B: Ancho de banda descendente de 512 Kbits/segundo, y ascendente de 128 Kbits/segundo.
Modalidad C: Ancho de banda descendente de 2 Mbits/segundo, y ascendente de 300 Kbits/segundo.

La posibilidad de acceder a las modalidades anteriores dependerá de las características técnicas concretas de cada línea de abonado, según los aspectos siguientes:

Que la central telefónica a la que pertenece la línea tenga activado el servicio ADSL. Para conocer la disponibilidad de este servicio en un determinado número de teléfono, puede consultar la base de datos de Teléfonos.
Que la calidad de la línea lo permita, dependiendo de la distancia a la central y de la calidad del cable telefónico. Sólo se puede certificar la validez de la línea telefónica realizando las oportunas mediciones desde el domicilio del usuario final por personal especializado.

Comparativa ADSL y módem

Demo de Telefónica



Comparativa ADSL y cable-módem


Ambas tecnologías son equivalentes, y deben entenderse como complementarias, principalmente por las limitaciones del bucle de abonado, actualmente gestionado por el operador Telefónica de España.